Toda crisis es una oportunidad. Por eso, cuando una economía está en recesión es fundamental trabajar de forma inteligente.
Si los recursos son escasos y el consumo también, hay que buscar las mejores estrategias posibles para transformar los malos momentos en situaciones positivas.
Una buena gestión de las relaciones con los clientes (CRM) es el motor ideal para vencer a la crisis. Un artículo publicado en Inside CRM recoge algunas ideas al respecto que es bueno tener en cuenta:
1. Sácale más provecho a tus clientes actuales
Es importante saber qué quieren tus actuales clientes y ofrecerles el producto que buscan en el momento que lo necesitan. Un sistema CRM te permite recolectar y organizar la información sobre lo que tus clientes desean, para que puedas analizar las áreas de oportunidad, incluso en tiempos de incertidumbre económica.
2. Identifica y concéntrate en tus mejores clientes
Todos los clientes son importantes. No se trata de olvidar a unos para privilegiar a otros, sino de enfocar la atención en aquellos que producen más beneficios. Los sistemas de CRM puede ayudarte a categorizar a tus clientes según sus hábitos de consumo y descubrir nuevas posibilidades.
3. Mantén la fidelidad de tus actuales clientes
En momentos de recesión no hay nada tan importante como los clientes que ya tienes. Por eso hay que hacer dos cosas fundamentales: cumplir las promesas que les haces, y mostrarles que entiendes sus necesidades. Una gestión de relaciones con los clientes inteligente puede servirte para identificar individualmente a cada uno, organizar los pactos que tienes con ellos, resolver problemas de forma inmediata y mantener una buena relación post-venta.