Las prioridades de la mayoría de las empresas están vinculadas directamente a la reducción de costos. Pero, ¿de qué sirve economizar en materia prima si esta no es la ideal para fabricar nuestros productos? ¿Qué sucedería si los productos finales son económicos, pero difieren de lo que el consumidor está buscando?
El éxito en el mundo de los negocios radica en la integración de todos los sectores de una empresa. Y eso es lo que Consorcio Metal Plástico (JUMBO) –fabricante mexicana de juguetes de plástico- comprendió que le estaba faltando y lo que la impulsó a implementar SAP Business One.
“Hemos logrado realizar una retrospectiva al origen de nuestro negocio y nos dimos cuenta de que nos estábamos olvidando de lo más importante: el cliente”, explica Luis Gerardo Inman, Director de la empresa.
Por eso, la compañía optó por enfocarse en aumentar la visibilidad del negocio. “Una de las cosas que hicimos fue profesionalizarnos”, señala Inman, quien admite haber subido a un plano diferente para poder ver un poco más allá y llegar a diferenciar, comprender y coordinar las cuatro divisiones de la compañía: manufactura, administración, ventas y procesos. “Hoy puedo ver a cada uno de los departamentos con mayor claridad”, agrega.
La optimización de los recursos es un objetivo cumplido para Consorcio Metal Plástico. “Ahora podemos controlar los inventarios y realizar un seguimiento puntual de las ventas, los cobros y del flujo de cada uno de los 22 puntos de venta para calcular su nivel de rentabilidad”.
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