Las personas que ejercen el llamado “liderazgo de opinión” (thought leadership) tienen una característica particular: su capacidad de dar las mejores respuestas a las preguntas de los clientes.
No solo es una voz autorizada en los temas que trata sino que tiene la capacidad especial de convencer a los demás de que su contenido es el más innovador, y de que puede hacer que crezca tanto la empresa como el sector al cual pertenece.
Un líder de opinión es visto como especialista en cierta industria, y actúa como un “catalizador de cambios”, promoviendo una visión innovadora sobre cómo hacer las cosas.
Pero es importante preguntarse algo: líder, ¿se nace o se hace? Sin duda, hay cualidades innatas pero la mayoría pueden aprenderse con trabajo y empeño.
¿Cómo puedes adquirir esta capacidad de influir en los demás?
- Identifica las preguntas que se hacen los clientes.
- Esfuérzate en dar las mejores respuestas posibles a esas preguntas.
- Utiliza todos los medios y canales posibles para responder.
- Transmite los contenidos de manera innovadora para destacarlos.
- Estimula la interacción de los clientes con el contenido de la empresa.
La estrategia de una persona con capacidad de dirección también refuerza la reputación de una empresa, ya que si el líder es percibido como tal, el poder de influencia de la organización aumenta.
Las organizaciones que cuenten con un conductor de este tipo serán capaces de destacarse y ganar exposición (share of voice), establecer una sociedad de colaboración con los stakeholders, y posicionar a su compañía como fuente de información confiable.
Lo cierto es que su punto de vista tiene más fuerza que el de los demás porque siempre es capaz de hacerles creer que tiene la mejor solución ante un problema. Por todo esto es que los líderes de opinión son quienes siempre portan las banderas de los cambios más importantes.
¿Estás listo para convertirte en uno de ellos?