Convertir las expectativas de una empresa en un valor real ya no es un sueño. La tecnología in-memory y la gestión de Big Data aparecieron como las herramientas para hacer realidad el proyecto de establecer modelos de negocios en tiempo real y convertir a la proactividad en una norma de trabajo.
Bloomberg Businessweek realizó una investigación que explica que las empresas de energía tienen cada vez más expectativas sobre las herramientas analíticas. Y los beneficios que están causando en el sector ya se están comenzando a ver.
Rentabilidad
Provistas de datos en tiempo real, las unidades de negocio de la industria química pueden tomar decisiones más acertadas con respecto al panorama empresarial sobre cómo gastar y qué precios fijar para sus productos.
Control
Las empresas de energía pueden anticiparse a posibles fallas de los equipos y prevenirlas mediante analíticas orientadas a pronosticar cuándo las máquinas necesitarán servicio técnico.
Eficiencia en la cadena de suministros
La cadena de suministros también puede agilizarse con el uso de tecnologías analíticas. Esto implica que empresas como The Dow Chemical Company analice 4 mil millones de dólares en gastos de material en crudo para tomar decisiones tales como la renegociación de contratos o elegir el momento de compra de acuerdo a los precios vigentes a fin de reducir costos.
Integridad operacional
Para el operador de redes Alliander predecir los momentos de presión frente al cambio en los patrones de consumo es fundamental. Los 22 mil sensores de la compañía generan 3,15 mil millones de grabaciones al año. Este volumen de Big Data es procesado de manera automática, obteniendo resultados que permiten predecir riesgos operacionales.
Las herramientas analíticas entonces reducen las fallas del sistema y los riesgos propios del sector energético. De esta manera ya no solo es posible obtener beneficios e incrementar las expectativas, sino también gestionar los negocios con proactividad.