El talento de cada uno de los miembros de tu organización es indispensable para cumplir con las tareas de cada día, sin embargo para elevar a tu empresa más allá de tus expectativas no basta con la suma de estos esfuerzos individuales, la respuesta es simple: ¡trabaja en equipo!
Y aunque parece sencillo alcanzar ésta necesidad de colaborar, la falta de una cultura que incentive la colaboración suele ser un freno de mano para las empresas. Es por eso que compartimos contigo los siguientes consejos que ayudarán a que tu compañía inicie el proceso que la llevará a optimizar la forma en que se comunica y mejorar el trabajo en equipo.
Promueve iniciativas que permitan a tus empleados conocerse entre sí.
Tanto en las grandes empresas como en las PyMEs es complicado que los miembros desarrollen relaciones adicionales a las laborales, sin contar a su círculo primario (compañeros de su área de trabajo, del mismo piso, etcétera), sin embargo debes promover que tus empleados convivan con aquellas personas lejanas a aquellas con las que convive día a día, para que así se conozcan y puedan iniciar el proceso de colaboración.
Por ejemplo: existen servicios como el de Aventones, iniciativa de transporte compartido (carpooling) que opera en varios países de América Latina, cuya finalidad es el sacar automóviles de las calles en favor del ambiente, pero que otorga beneficios adicionales para las organizaciones. Y es que el promover en tus empleados la idea de compartir su coche con otros compañeros para llegar al trabajo, implica un par de horas en que compartirán un espacio reducido en el que convivirán por inercia, de manera voluntaria y fuera de sus horas de trabajo.
Modifica el espacio en tu oficina.
Hay oficinas que simplemente no se prestan para la colaboración; en las que hay tantas puertas, paredes y cubículos que no llegas a mantener ni una conversación con personas que se encuentran a menos de medio metro de ti.
Entre los ejemplos de comunicacion efectiva en las empresas suele haber un denominador común: la comunicación se incentiva desde la distribución del espacio de convivencia. Optar por espacios abiertos en tu oficina y dejar que las puertas permanezcan siempre abiertas permitirá que tus empleados no sólo se vean, sino además que platiquen, bromeen, compartan, se relacionen y que terminen por colaborar. Hacer modificaciones a tu lugar de trabajo tal vez pueda resultar en un costo elevado e incluso en algunas problemáticas con algunos miembros de tu empresa, pero pronto verás cómo tu organización cambia por completo y empieza a ponerse en sintonía.
Aprovecha las tecnologías de colaboración.
Ha surgido la necesidad de que las empresas se vuelvan sociales tanto interna como externamente, y para eso existen herramientas que ayudan a las compañías a aumentar su productividad optimizando la colaboración. ¿Te imaginas las posibilidades de tener una red social en la que participen todos tus empleados?
De acuerdo a un estudio realizado por Success Factors, 3 de cada 4 personas encuestadas cuyas compañías utilizan tecnologías de colaboración sienten que sus organizaciones cumplen en gran medida con la labor de comunicar las estrategias, logrando que los esfuerzos de todos los colaboradores se encaminen a un solo objetivo. Este es sólo uno de los beneficios de que las herramientas de colaboración proporcionan, y cuyo potencial es mayor al que podemos imaginar.
¿Y tú cómo promueves la colaboración entre tus empleados y compañeros de trabajo?
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