¿Se ha preguntado cómo las emociones y la tecnología pueden influenciar la industria de viajes?
Para tocar este tema, primero debemos entender su origen: el neuromarketing, la aplicación de técnicas de la neurociencia al marketing para conocer y comprender los niveles de atención que muestran las personas ante distintitos estímulos, lo que ayuda a comprender mejor las razones y emociones por las que una persona toma una decisión.
Sabiendo lo anterior, el neuroturismo busca conocer qué piensa y siente una persona que desea realizar un viaje. En este caso está técnica se usa para lograr que un cliente se decida por un destino u otro, sin siquiera haber estado ahí. Busca tocar las fibras emocionales de un consumidor a través de la experiencia intangible en dicho destino para permanecer en la mente del consumidor en forma de recuerdos memorables.
¿Qué deben considerar las empresas de la industria de viajes que emplean el neuroturismo?
- Conectar con los pensamientos reales de la gente. En la Feria Internacional del Turismo del 2014 en Madrid se presentó “El Destinómetro”, que consiste en una actividad interactiva en la que los participantes, conectados a sensores, por medio del cual se puede visualizar un conjunto de imágenes de diferentes destinos turísticos españoles. Gracias a la medición de los impactos emocionales se determina cuál es el destino ideal para cada uno de los usuarios.
- La nariz como parte esencial de la venta. Siendo el olfato el sentido que mejor percibimos y que mejor se conserva en nuestra memoria, las empresas turísticas deben cuidar este punto para crear experiencias que queden grabadas en la audiencia. Centrarse en el mismo ayuda en el proceso de pre-compra (en puntos de venta), recreando el olor del destino que se quiere promocionar.
- Acércate a expertos. Si bien sabes que quieres resultados, necesitas a un especialista que te diga cómo pueden obtener el mejor provecho a estas técnicas. Pues cuando viajamos no estamos muy seguros de lo que queremos, ahí es donde entra la ciencia para que ayudemos al usuario a hacer una mejor planificación.
Actualmente, el neuroturismo espera dotar a los turistas de dispositivos tecnológicos, para analizar su comportamiento en conjunto con el propio interés del viajero.
Por ejemplo, la Junta de Turismo de Singapur utiliza tecnología electroencefalografía (EEG) está siendo utilizada para realizar un estudio financiero de una sección representativa de los viajeros que se dirigen a la isla. A través de este estudio esperan descubrir lo que la gente ama de cada uno de los puntos culturales y de aventura del país, con tal de enfocarse en externar esas experiencias en posibles nuevos visitantes.
¿Cómo funciona? Las personas llevan un dispositivo tipo tiara capaz de medir la respuesta emocional del cerebro a una actividad: emoción, diversión, felicidad, interés, estrés y niveles de relajación de la persona. Aunque no todos reaccionamos de la misma manera ante un evento, al analizar el conjunto de resultados pueden sugerir que ciertos grupos pueden sentirse de la misma manera y así poder generar comunicación específica para ellos. Aquí puedes ver más de este interesante estudio: http://www.yoursingapore.com/en.html
Como vemos, estamos ante el inicio de una nueva forma de estudios de mercado que romperán barreras tecnológicas, pues el neuroturismo nos puede ayudar a descubrir qué es lo que realmente quieren nuestros clientes, y no desde lo que nos puedan decir las encuestas, sino desde lo más profundo de sus pensamientos, lo que nos ayudará a brindarles experiencias realmente inolvidables.
Si quiere obtener más información de cómo la tecnología puede ayudarle a brindar mejores experiencias, en cualquier industria, visite nuestra página.
Referencias:
© 2017 SAP SE. All rights reserved.
SAP and other SAP products and services mentioned herein as well as their respective logos are trademarks or registered trademarks of SAP SE in Germany and other countries. Please see http://www.sap.com/corporate-en/legal/copyright/index.epx#trademark for additional trademark information and notices.