Las flores son protagonistas en estas fechas y se convierten en una muestra de amor para nuestros seres queridos. Es bien sabido que la demanda de este producto se intensifica en la temporada de amor y amistad, pero, ¿qué hay detrás de su producción y el camino que deben recorrer las flores para llegar a su destino final?
En 2021, según el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, la cifra de ventas de flores al exterior en 2021 fue de US$1.727 millones , logrando un aumento de 17,1 % frente a las cifras pre pandemia (2019), lo que implica una gran ganancia de exportaciones en la celebración.
Cuando llegan los altos picos de demanda, las empresas deben estar preparadas, conocer qué capacidad existe para cada etapa del proceso y cómo se responderá. Aunque en los últimos años la pandemia generó cambios importantes en la logística para estas fechas, los recursos ya no estaban tan disponibles como antes, hoy el comercio ya cuenta con más normalidad y se prepara para esta celebración.
De acuerdo con Marcelo Moreno, Director de SCP en SAP para el Norte de América Latina “es indispensable entender que el proceso para cumplir y entregar el producto en excelentes condiciones es importante en todo el recorrido, desde los cultivadores hasta el consumidor final. Con ayuda de las herramientas tecnológicas estos procesos de logística son mucho más eficientes y se adaptan a la necesidad de cada negocio”.
Dada la importancia de ese camino que lleva a las flores de los campos a las manos de quienes festejan esta fecha, a continuación presentamos 5 claves que son esenciales para que la logística de las flores desde su punto de producción a la venta final sea la más adecuada y precisa.
- lineación del ciclo de vida del producto. Primero, es importante entender que las flores son un producto perecedero. De ahí que esta industria tenga ciertas características que otras no tienen, como por ejemplo la necesidad de producir en determinadas fechas, tiempos cortos de desplazamiento y una comercialización no tan prolongada, pues de lo contrario las flores pueden morir. En este sentido, los actores de la cadena deben entender cuál es su papel en cada momento y así estar alineados para obtener el máximo provecho de cada planta.
- Planificación de la producción. En este punto radica gran parte del éxito del proceso que lleva a que una flor llegue a tiempo para celebrar el amor y la amistad. Los exportadores e importadores de flores realizan procesos de planificación que, por lo general, son de varios años para dar como resultado la producción de una flor para una fecha determinada. Aspectos como el número de unidades que se cargan, la temperatura de los camiones, herramientas tecnológicas como sensores, termómetros y códigos RFID son indispensables para que los productos lleguen a tiempo. Para ello, es preciso tener en cuenta, entre otros, cuáles cultivos estarán listos para producción en cierto momento; qué materiales e insumos son indispensables para el cultivo; cuántas personas y en qué turnos trabajarán para lograr el objetivo; cuánta maquinaria se necesitará para hacer la recolección; qué aparatos como bandas transportadoras o herramientas se requerirán para el armado de los ramos y su empaque. Algunas soluciones tecnológicas existentes en el mercado, como SAP Ariba, permiten realizar ese proceso de planificación de manera más acertada y precisa. “herramientas como esta ayudan a los negocios a distinguir y definir cuáles son los objetivos que pueden cumplir dependiendo de su capacidad, y así mismo delegar de manera correcta las funciones de sus colaboradores para poder llegar a cumplirlos”. menciona Marcelo Moreno de SAP.
- Transporte. Es una de las áreas más sensibles en el proceso de exportación de flores. Las flores no solo deben estar almacenadas en condiciones óptimas para evitar su deterioro, sino también su transporte debe ser a tiempo.
- Trazabilidad. Llevar un registro pormenorizado del movimiento de una flor desde la planta hasta su comercialización representa información invaluable para los productores. La trazabilidad permite realizar un seguimiento a todos los eventos de la producción y ayuda a comprender cómo se da cada paso para reaccionar o corregir errores en la cadena de suministro. Por ejemplo, con sensores es posible tener un monitoreo en tiempo real de lo que está ocurriendo en una planta de producción, cuántas unidades se están procesando, el número de ramos que pasa por una banda transportadora, o la cantidad de productos que se carga en un camión. La industria de las flores puede sufrir diferentes percances, como el sobrecalentamiento de una estiba en el embarque o un camión refrigerado que no cumple con la temperatura correcta y que podría arruinar las flores. Aquí, los sistemas tecnológicos pueden detectar específicamente dónde se presenta el error para su posterior corrección antes de que las consecuencias sean más grandes.
- Integración de procesos. Un proceso integrado de punta a punta significa tener toda la información enlazada en un sistema que consolide aspectos como compras, gestión de inventarios, producción, transporte, almacenamiento, distribución y ventas.