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Así como la globalización ha acelerado la manera en que se realizan negocios, lo mismo ocurre con la velocidad con la que se expanden las epidemias en el mundo. Esto se debe a que se mueven tan rápido como los humanos puedan viajar. En la actualidad, debido a las facilidades que nos otorgan los medios de transporte, los individuos nos podemos trasladar de un lado al otro del planeta en tan sólo algunas horas.

Como consecuencia, cuando una situación epidemiológica se registra en una región, la misma puede desplazarse con inmediatez. Tal es el caso del coronavirus COVID-19 que en cuestión de semanas pasó de ser un virus que se originó en Wuhan, China a una emergencia sanitaria de calibre mundial.

Sin desestimar el grave impacto en la salud pública, en el aspecto económico la situación no es mejor. Standard & Poor’s anticipa una recesión global durante este año como resultado del COVID-19 y la volatilidad de todos los mercados financieros. Además, la agencia de calificación crediticia prevé que la cartera vencida (“NPLs” por sus siglas en inglés) pudiera alcanzar $1.1 billones de dólares ($1.1 trillions en inglés) en todas las industrias. Para nuestro país el panorama no es distinto. Se anticipa un crecimiento negativo del 4.5% en el PIB de acuerdo con el Bank of America.

Ante esta realidad poco alentadora, la Empresa Inteligente puede ser un habilitador para la continuidad de los negocios, pero sobre todo para recuperarnos rápidamente de esta situación que aqueja a todas las industrias. Para ello, se pueden apalancar las soluciones tecnológicas que comprende la Sociedad 5.0, que de acuerdo con Cabinet Office (CAO), nos adentramos a un concepto donde la convivencia entre personas, robots y cosas son una realidad gracias a la Inteligencia Artificial.

Para maximizar el uso de este concepto en un contexto donde el distanciamiento social es prioritario y mandatorio, se pueden mencionar algunos ejemplos como los siguientes:

  • La Empresa Inteligente con la disponibilidad actual de sensores, robots, máquinas y soluciones tecnológicas tiene la capacidad de continuar sus operaciones de manera automática minimizando las interacciones de personas, quienes solo ejecutan tareas de valor. Es decir, individuos a distancia pueden verificar desde una sola plataforma las necesidades de determinadas líneas de producción o bien, anticipar fallas con el uso de dispositivos que van detectando anomalías
  • Para hacer frente al desabasto de las cadenas de producción que muchas industrias en México ya están padeciendo, se puede recurrir a plataformas como SAP Ariba Discovery, la cual permanecerá de forma gratuita para que las compañías publiquen sus necesidades de abastecimiento y con lo cual proveedores de cualquier parte del mundo puedan identificar oportunidades para satisfacer estos requerimientos

Al tener las capacidades anteriormente descritas, las empresas podremos ser más eficientes ante un proceso donde los colaboradores puedan evitar estar físicamente en alguna planta, centro de producción o distribución para cumplir con el proceso de cuarentena y esto ayudará definitivamente a minimizar los impactos de salud y económicos.

De igual forma, traslademos esta Empresa Inteligente a la realidad que muchos retialeros en el país van a sufrir en los próximos días, quienes cumplen una función vital al abastecer a la población con víveres en momentos tan críticos. Las compañías de esta industria que cuenten con los procesos automatizados precisos podrán responder con velocidad a las demandas que exige el mercado. Por poner un ejemplo de la capacidad tecnológica de la Empresa Inteligente en esta industria, Chedraui puede analizar millones de datos diarios para cambiar en automático 5 mil precios al día y así ofrecer la mejor oferta al mercado gracias al ERP Inteligente de SAP. Tomando como referencia este ejemplo de la industria, sabemos que muchas empresas de este sector ya cuentan con las herramientas tecnológicas adecuadas para analizar inmediatamente las necesidades de abasto que requieren sus tiendas.

Si bien, la pandemia fue un efecto de la hiperconectividad y facilidad de movilidad que caracteriza a la época que vivimos, debemos hacer uso de esas mismas herramientas que la tecnología ofrece para responder oportuna y rápidamente. Es importante puntualizar, que a medida que la situación de salud pública mejore, el reto que nos queda es económico y de desarrollo, y es ahí donde las empresas deben redoblar esfuerzos para acelerar sus operaciones.

Por: Oziel González, Director de Ingeniería de Valor para la Industria de Construcción y Manufactura, SAP México